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El parlamento de Brasil concluy贸 la aprobaci贸n de la ley que reemplaza el programa de vivienda social Mi Casa Mi Vida, que es una herencia del gobierno anterior, por otro. El nuevo programa se llama Casa Verde e Amarela (verde y amarilla, en portugu茅s).

Con la sanci贸n del proyecto por el presidente Jair Bolsonaro, que fue el autor de la iniciativa, desde este momento las iniciativas de construcci贸n de vivienda social en Brasil ser谩n llevadas a cabo bajo el nuevo programa.

Las diferencias entre los dos programas, en tanto, son poco significativas, dado que el mecanismo general no cambia. Sigue siendo un programa de subsidio p煤blico para la adquisici贸n de inmuebles populares construidos por empresas privadas que, para realizarlos, tienen que mantener sus proyectos dentro de una serie de caracter铆sticas.

Los beneficiarios del Casa Verde e Amarela ser谩n divididos en tres grupos, de acuerdo con sus ingresos familiares. Desde cero ingresos hasta 2.000 reales; entre 2.000 y 4.000 reales; y entre 4.000 hasta 7.000 (1.000 reales valen hoy cerca de US$ 192). Las tasas de inter茅s son variables de acuerdo con la regi贸n del pa铆s: en el Norte y Noreste (m谩s pobres) ser谩 de, 4,25% al a帽o, mientras en el resto del pa铆s ser谩 del 5%.

Las empresas que ten铆an contratos en ejecuci贸n por el Mi Casa Mi Vida seguir谩n con sus obras normalmente en las reglas del programa anterior. Las que est茅n retrasadas en las obras contratadas tendr谩n un plazo m谩ximo de 30 meses para concluirlas. El programa podr谩 usar fondos p煤blicos para apoyar las constructoras en el proveimiento de infraestructura urbana alrededor de los condominios que se construyan.

En el aspecto ambiental, el programa exige que las constructoras prefieran materiales de construcci贸n sustentable, como ladrillos reciclados, y que provean accesibilidad a personas que sean portadoras de discapacidad f铆sica.